Nada se sabe sobre la fecha de su fundación, aunque se cree que podría existir desde el siglo IX. En la Edad Media se edificaron numerosas ermitas con esta advocación en Extremadura, principalmente por los caballeros Templarios, destinadas en su mayor parte a servir de “hospitales” en los que se acogía a los leprosos.

De la cillerana ermita de San Lázaro solamente sabemos que se encontraba en las afueras de la población, en el Camino de Coria y que debió desaparecer hace muchos siglos, pues en posteriores visitas, realizadas en la Edad Moderna, ya no se menciona la misma. La imagen de San Lázaro también desapareció, ya que no se encuentra reubicada en la Iglesia de Nª Sª de los Apóstoles, ni en ninguna otra de las ermitas.

La Ermita de San Lázaro, según pintura del cillerano Leonardo Hidalgo