A raiz del gran incendio acontecido en Sierra de Gata en el año 2015, la Junta de Extremadura invirtió un total de 1.857.550 euros en las obras de protección del embalse del Prado de las Monjas (Acebo) para paliar los efectos del incendio forestal, en concreto para evitar que hubiese contaminantes en el suministro de agua potable a las localidades abastecidas. Con esta actuación se pretendió evitar que las reservas acumuladas en embalse, del que se abastecen de agua potable las localidades de Acebo, Hoyos, Villamiel, Trevejo, Perales del Puerto y Cilleros, recibiesen las cenizas y otros contaminantes causados por la erosión del incendio con las lluvias de otoño a través de las corrientes naturales.

Adicionalmente, se realizararon las obras de emergencia necesarias para garantizar un abastecimiento alternativo de agua desde el embalse cillerano de "La Atalaya", que por entonces estaba fuera de uso para el abastecimiento urbano,  de tal forma que pudiese entrar en funcionamiento en caso de necesidad. Con la ejecución de las obras se aportó el agua al sistema actual de la red de conducciones haciéndola circular en sentido inverso. El agua se impulsaba hasta el municipio de Cilleros, el punto superior de la cota, desde donde se abastecía al resto de las poblaciones. 

Presa de La Atalaya