En la arquitectura tradicional de Cilleros, y en mayor ámbito, en toda la Sierra de Gata, en las fachadas de las casas y en otros elementos arquitectónicos, aparece representada una estrella de seis puntas insertada en un círculo. Debido a lo común de su presencia en la mayoría de los pueblos de esta comarca cacereña, se decidió a finales del siglo XX, en torno a la década de los 80, adoptarla como emblema de la Sierra de Gata. Para algunos representa a la flor del olivo, para muchos otros, este tipo de representaciones tiene un fin protector, motivo por el que aparecen en las fachadas de las casas con el objeto de ahuyentar los malos espíritus. Habiéndose heredado esta creencia de los antiguos pueblos prerromanos, en concreto de los celtas.


Así lo han interpretado en el norte de Italia, donde lo denominan “Sole delle Alpi”; aunque también se le conoce por el nombre “Fiore delle Alpi” y “Margherita a Sei Petali”. Lo cierto es que se trata de un hexagrama insertado en un círculo que representa al astro Sol, el cual le transmite a esta representación un poder giratorio y protector, además de aportarle luz y calor. E igual que la rueda de la vida, el Sole delle Alpi, representa el tiempo cíclico de la existencia del hombre en el Cosmos. La flor es un signo portador de fortuna que indica la belleza, la pureza y la vida que surge después del invierno; y concretamente representaría a la flor alpina que crece en unas condiciones muy desfavorables. Asimismo esconde un origen antiguo y difuso; al mismo tiempo que muy común en todo el arco alpino en donde se ha convertido, como hemos mencionado anteriormente, en un símbolo del pueblo padano.

Pero la historia atribuye el origen de este emblema a la llegada de las tribus galas, las cuales se asentaron en la llanura padana tras quebrar la resistencia indígena y etrusca. De ahí el nombre de Galia Cisalpina, con la que a partir de entonces se iba a conocer a esa región por los romanos. Los Insubres y los Cenomanos ocuparon las tierras al norte del Po; aquellos se establecieron en la parte más occidental y fundaron Mediolanum (Milán), los Cenomanos se asentaron más al este en la zona de Brescia. Al sur del río se establecieron los Boyos, Lingones y los Senones, entorno al año 400 a. C. Serían estos últimos quienes, según los actuales historiadores padanos, los que introdujesen el Sole delle Alpi en esta región. Sin embargo, la Fiore delle Alpi o Sole delle Alpi no es exclusiva de la Padania, pues también nos la encontramos en la Península Ibérica; sobre todo en la parte noroeste de la misma, así la vemos representada en estelas funerarias romanas como las que se encuentran en algunos museos arqueológicos como el de Vigo, Santander y Lisboa.

¿Cómo y cuándo aparece el Sole delle Alpi en nuestra comarca?. Cuatro podrían ser las hipótesis posibles:

1ª.- Una hipotética aportación celta que se podría deber a una emigración de pueblos prerromanos como los galos Senones o los Ligures, los cuales entrarían en la Celtiberia estableciéndose en toda la parte noroeste de la misma; motivo por el que esta representación aparecería en Portugal, Galicia, Asturias, Cantabria y Norte de Extremadura.

2ª.- La romanización y la entrada de las legiones romanas compuestas por soldados descendientes de los celtas galos establecidos en la Padania, serían los transmisores de la Fiore delle Alpi.

3ª.- La repoblación llevada a cabo en la época de la Reconquista con gentes traídas de Asturias, Cantabria y Galicia al norte de Extremadura provocaría la aparición de este símbolo en los pueblos de la Sierra de Gata.

4ª.- Por último, hay quienes creen ver en la Margherita de Sei Petali a la Estrella de David (Magen David, Escudo de David, o Sello de Salomón), ya que ambos no dejan de ser meros hexagramas.

En los últimos tiempos, con el derribo de las casas antiguas, han desaparecido gran número de estos símbolos; pero aún se conservan bellos ejemplos en algunas fachadas, dinteles y balcones de la villa de Cilleros.






Fuente: Jesús Carlos Rodríguez -Simbología prerromana en la arquitectura tradicional de la Sierra de Gata