Un mascarón de fuente es una cabeza o rostro, a menudo grotesco, mitológico o humano estilizado, que se utiliza en la arquitectura de fuentes o piletas como el punto de salida del chorro de agua. El agua fluye a través de un orificio, generalmente situado en la boca del rostro.

El uso de cabezas esculpidas como surtidores se remonta a la Grecia y Roma antiguas. Se empleaban figuras de dioses marinos o fluviales (como el dios Océano o Neptuno), ninfas, sátiros y faunos, ya que el agua se asociaba a lo divino y a la naturaleza. Pero, fue en el Renacimiento y, sobre todo, en el Barroco (siglos XVI al XVIII) cuando los mascarones alcanzaron su máximo esplendor, especialmente en Italia (donde se les llama mascheroni) y, posteriormente, en toda Europa, incluida España. Se convirtieron en elementos decorativos indispensables en palacios, plazas públicas y jardines.

Mascarón de la Fuente del Guijo, Cilleros

La elección del rostro no era aleatoria, y cumplía varias funciones:

- Funcional: Su propósito primordial es servir como la boquilla o caño por donde el agua es expulsada de manera controlada. El orificio en la boca está conectado al sistema de tuberías.

- Mitológico: Muchos representan dioses, criaturas míticas (como dragones o leones) o seres del bosque (faunos, sátiros), simbolizando la fuerza de la naturaleza, el misterio del agua y la fuente de la vida.

- Alegórico/Grotesco: A menudo presentan expresiones exageradas, de asombro, ira o incluso cómicas. Se cree que estas caras grotescas (los grotteschi) tenían la función de alejar los malos espíritus de la preciada fuente de agua o simplemente servir como elementos ornamentales llamativos.

- Representativo: En algunos casos, se utilizaban para representar a la propia ciudad, a un personaje histórico o a un concepto alegórico (como la Sabiduría, la Abundancia, o los ríos locales).

El mascarón de la Fuente del Guijo, lo hemos denominado así ya que se encuentra en dicho paraje aunque desconocemos si tuvo algo que ver con el topónimo de su nombre, muestra el rostro de un hombre con bigote y se asemeja a varios tipos de mascarones clásicos y populares, el de los "Hombres Barbudos, Rostros de ancianos o personajes con barbas y bigotes prominentes", cuyo simbolismo aludiría a la sabiduría, edad, o sería la alegoría de un río o un espíritu local protector de la fuente.

La pieza muestra un rostro humano, algo deteriorado en la parte superior izquierda, con rasgos marcados, incluyendo lo que parece ser un gran bigote, barba y ojos estilizados. El rasgo más revelador es el agujero negro y redondo justo en la boca,  utilizado para canalizar el agua, permitiendo que fluya como un chorro o goteo hacia una pila o estanque. Construido en granito fino, el color terroso, las grietas y la textura áspera sugieren que es una pieza antigua y destinada a la intemperie.

Mascarón de la Fuente del Guijo, Cilleros

Buscando otros ejemplos de mascarones que representen rostros humanos con gran bigote, se encuentran ejemplos muy similares en varias fuentes y pilones, sobre todo en la ciudad de Granada:

Pilar de la Antequeruela (Granada)

Mascarón de la Antequeruela (Granada)


Fuente y fotografías: Pilones en el mapa